El presente documento ha sido elaborado por profesionales de la Escuela de Salud Pública y el Departamento de Enfermería Facultad de Medicina de la Universidad de Chile y ha sido suscrito por el Colegio Médico, Confusan, Fedasap, Fenassap, entre otras.
Sabemos que las epidemias tienen un efecto en la salud mental del personal de salud; lo vimos en las experiencias de las epidemias del SARS (2003) y MERS (2012).
En la actual pandemia de COVID-19 se identificó el surgimiento entre el personal de salud en China de sintomatología depresiva en el 50,4 por ciento, de ansiedad en el 44,6 por ciento, insomnio en un 34 por ciento y de estrés en un 71,5 por ciento. Por lo anterior, no solo se trata del riesgo sanitario de contagio del COVID19 entre el personal de salud, que por ejemplo en Italia alcanzó al 20 por ciento, sino también reconocer la importancia de proteger la salud mental del personal de salud.
Ante este escenario, este es un primer documento de una serie que la Escuela de Salud Pública (ESP) estará difundiendo para promover la reflexión y valoración de la salud mental del personal de salud.
Corresponde a una adaptación para la realidad chilena de recomendaciones elaboradas por la Organización Panamericana de Salud y la Fondazione Policlinico Universitario Agostino Gemelli de Roma, Italia.
En un segundo momento, la ESP compartirá insumos que aborden los riesgos psicosociales en los lugares de trabajo a los que está expuesto el personal de salud con la actual pandemia; y luego, un tercer documento sobre recomendaciones prácticas de alertas de problemas de salud mental en el personal de salud, tales como burnout y otros.