Investigadores U. de Chile participan en libro «Saltar el torniquete: Reflexiones desde las juventudes de octubre»

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La obra, centrada en el rol de los jóvenes durante el estallido social, fue presentada este miércoles 13 de enero en un seminario en línea organizado por el Fondo de Cultura Económica. Las investigadoras del Centro de Estudios de Conflicto y Cohesión Social (COES), Emmanuelle Barozet (UChile) y Paula Luengo (UC), expusieron en la ocasión, junto a un panel compuesto por el director de la editorial, Rafael López; el profesor de sociología de la Universidad de Chile, Manuel Canales, y el profesor de la Universidad Austral, Yanko González.

El libro “Saltar el torniquete: Reflexiones desde las juventudes de octubre”, publicado recientemente por el Fondo de Cultura Económica, reúne una serie de investigaciones y relatos que buscan profundizar el debate respecto a la participación de los jóvenes durante el estallido social. La compilación del material de esta obra estuvo a cargo de Sol Alé, Klaudio Duarte, académico de la Universidad de Chile y educador popular, y Daniel Miranda, investigador del Centro de Estudios de Conflicto y Cohesión Social (COES) y Mide UC.

La investigadora COES y profesora titular de la Escuela de Sociología de la Universidad de Chile, Emmanuelle Barozet, se refirió al capítulo “Debe ser un niño que tiene rabia, que tiene como un dolor con la sociedad”, el que escribió en co-autoría con Óscar Mac-Clure, José Conejeros y Claudia Jordana. Este capítulo, cuyo título hace referencia a una de las frases recogidas en uno de los grupos focales en Puerto Montt, surge del estudio de las percepciones de clase que tienen las personas de distintos estratos sociales sobre jóvenes de sectores urbanos antes y después del estallido social. Lo importante era encontrar “qué es lo que ve, cómo se fija en el nivel socioeconómico, cuáles son los elementos más simbólicos que grafican la (percepción de la) desigualdad en Chile”, explica la socióloga.

Para comprender la evolución de las emociones y opiniones de los participantes, entrevistaron a grupos altos, medios y bajos en Santiago y Puerto Montt; y en tres momentos distintos entre agosto de 2019 y junio de 2020: pre estallido social, durante el estallido social, y durante la pandemia (discusión en línea). Las y los participantes tuvieron que analizar siete viñetas, entre ellas, a un accionista representando a una persona de élite, una trabajadora social de estrato bajo; y un joven urbano de 16 años, tapado con una capucha, y sobre el cual se basa el capítulo que escribieron. Más información respecto a la metodología, revisar aquí.

“Esto nos permitió ver cómo las percepciones sociales son construidas y evolucionan con cierta rapidez, particularmente en torno a estereotipos o a construcciones sociales compartidos en momentos determinados”, comenta la socióloga. En el primer momento (es decir, pre estallido social), señala que en Santiago primaba la visión del estereotipo del “flaite”, como forma de ser y expresarse; que tiene una actitud agresiva y, de alguna manera, vinculada con la delincuencia. Pero para muchos participantes, en especial aquellos provenientes de sectores populares, también “había un sentimiento de reconocimiento, como miembro del grupo propio, con un sentido compartido de pertenencia de los que vienen “de abajo” de la sociedad chilena”, aclara la investigadora.

Luego del estallido social, esta percepción cambió abruptamente y muta la descripción del “flaite” por “una persona que permite a los demás darse cuenta de cuán inmovilizados están en la sociedad”, fenómeno que las y los investigadores llaman, “liberación emocional” y “liberación cognitiva”. En general, este joven es alguien que “tiene rabia por el sistema, por la educación, por el gobierno, por los carabineros. Aparece como una emoción acumulada, y que desborda frente a la violencia estructural, la falta de oportunidades en la sociedad chilena”. Para los sectores más altos, la percepción de este joven representa una amenaza y se percibe como una marioneta dirigida por líderes. En cambio, en los sectores populares, “es una persona que va a permitir esa reconsideración del rol que cada uno tiene en la sociedad, y esa liberación (…) (muestra) que hay otras cosas posibles, más allá de todo lo que se ha sufrido en los años anteriores”.

En la última etapa, en tanto, aparece una nueva percepción respecto al mismo joven, “que ya no está libre de miedo con la pandemia”. De acuerdo a la profesora Barozet, todos los avances respecto a la liberación de los miedos, en particular, de los mayores de edad, con la pandemia, se repliega a la vida familiar, a la vida cotidiana. Ahora, el joven de la viñeta representa los conflictos que viven y que potencia la pandemia, desde la precariedad y la exposición, con ejemplos claros respecto a las situaciones que actualmente está viviendo este joven que representa a muchos jóvenes. Barozet agrega que con la pandemia, “está esta idea que a los jóvenes se les corta el futuro porque no tienen un horizonte. Lo habían tenido después del estallido, pero la pandemia corta todo esto y los relega a un lugar doblemente relegado en la sociedad por el adultocentrismo, por la pobreza y por la marginalidad”.

El trabajo se enmarca en el Fondecyt N°1190436, “La posición de uno mismo en la sociedad: lo justo y lo injusto en el espejo social”, con Mac-Clure como investigador responsable y Barozet como co-investigadora. Si bien no consideraba este análisis en el proyecto original, fue a partir de la situación social del país que decidieron agregar estos nuevos componentes a su proyecto.

Otros capítulos

En “Saltar el Torniquete” destacan nueve capítulos con autoría o co-autoría de investigadores/as del COES, y uno por parte de una estudiante patrocinada por el Centro. Entre ellos, figura “Cambios en la participación política de los escolares”, escrito por Daniel Miranda, también compilador/editor del libro, junto a Juan Carlos Castillo, investigador principal del COES y académico de la Escuela de Sociología de la Universidad de Chile. En este trabajo, los autores explican cómo han cambiado las disposiciones de los escolares a participar de acciones disruptivas y no disruptivas en los últimos 20 años, diferenciando por grupos sociales y respecto a experiencias de otros países.

Desde una perspectiva de las clases sociales, un grupo de investigadores/as escribieron «De olvidados a protagonistas: el estallido social visto desde la perspectiva de jóvenes populares», a cargo de Nicolás Angelcos (COES, UChile, UNAB), Andrea Roca (UChile), Emilia Cuadros (UAH, UChile), María Luisa Méndez (COES, UC), Alejandra Rasse (UC) y Valentina Álvarez (UDO).

También, la directora e investigadora principal del COES y académica del Instituto de Estudios Urbanos de la Universidad Católica, María Luisa Méndez, y Modesto Gayo, investigador del COES y profesor asociado de la Escuela de Sociología de la Universidad Diego Portales, abordan La movilización de los jóvenes “cuicos” entendida desde procesos de socialización, donde analizan a los/las jóvenes más privilegiados en base a sus formas de movilización o perfiles de protestas, a partir de una clasificación previamente realizada por ellos mismos, de la clase media alta chilena; y el rol de las familias en la socialización política.


Constanza Pérez Verdugo
Centro de Estudios de Conflicto y Cohesión Social (COES)