Reponer la glosa presupuestaria que garantice el equipamiento para la formación de especialistas y la continuidad del apoyo del Hospital Clínico de la Universidad de Chile (HCUCH) a la red asistencial, fue una de las propuestas planteadas por las autoridades de la Casa de Bello en la cita, enmarcada en la discusión por el presupuesto 2021.
Acompañado del doctor Luis Berr, de la directora del HCUCH, Graciela Rojas, y de las dirigentas funcionarias Myriam Barahona y Ximena Morales, el Rector Ennio Vivaldi, asistió este lunes 5 de octubre a la sesión virtual de la Comisión del Trabajo y Previsión Social de la Cámara de Diputados.
La sesión, presidida por la diputada Gael Yeomans, fue citada para evaluar en detalle la situación del HCUCH, que aporta más del 40 por ciento de los médicos especialistas y subespecialistas, que es el principal centro de investigación y de atención de alta complejidad del país, y que funciona como un complemento insustituible de la red asistencial, especialmente del área norte de la Región Metropolitana, donde otorga una proporción considerable de las prestaciones sanitarias.
El Rector detalló que pese a toda esta labor, el HCUCH “no es considerado como integrante del Sistema Nacional de Servicios de Salud, a pesar de pertenecer a la Universidad de Chile, una de las instituciones públicas más emblemáticas de la nación, y de haber jugado desde su fundación en 1952, un rol clave dentro del sistema público de salud chileno”.
Producto de esto, agregó, el Hospital no recibe aporte estatal en su presupuesto, debiendo autofinanciarse a través de la venta de prestaciones de salud a pacientes FONASA e ISAPRE. Lo anterior, sumado a los mayores costos por la función docente y la formación de especialistas, más los gastos asociados al cumplimiento de la normativa pública, ha impedido que exista un excedente financiero para inversiones. Es por estas razones, que “en los presupuestos 2017 y 2018 se aprobó una glosa presupuestaria que permitió al Hospital renovar equipamiento crítico necesario en la formación de especialistas para todo el país”.
Sin embargo, según detallaron las autoridades universitarias, las restricciones a la actividad asistencial producto de la pandemia ha generado una situación insostenible en materia financiera que pone en riesgo inminente la continuidad operativa del Hospital. “La situación del Hospital es totalmente distinta de la que han enfrentado las clínicas privadas quienes, ante este mismo escenario de merma en sus ingresos, tuvieron la posibilidad de acceder a programas de apoyo dispuestos exclusivamente para ese tipo de entidades”, detalló la doctora Graciela Rojas. Esto, pese a que al mismo tiempo la institución fue capaz de aumentar su capacidad de camas críticas en un 250 por ciento, llegando a más de 120 camas con ventilación mecánica, fortaleciendo la respuesta sanitaria de todo el sistema.
Esto se suma a que por tratarse de una universidad del Estado, no es posible endeudarse por un periodo que exceda al mandato presidencial, a menos que ello sea expresamente autorizado por el Ministerio de Hacienda.
En ese sentido, las propuestas hechas por las autoridades de la Universidad de Chile fueron tres: primero, permitir el acceso a un crédito con aval del Estado. En segundo lugar, reponer la glosa presupuestaria que garantice el equipamiento para la formación de especialistas y la continuidad del apoyo a la red asistencial; y en tercer lugar, trabajar una ley especial para el Hospital que reconozca sus características únicas y que norme su vinculación a la red pública.
“Siempre hemos dicho que estamos absolutamente abiertos a conversar de estrategias sanitarias, ver directorios conjuntos o lo que fuere para cuestiones de alta complejidad, como énfasis de la formación de especialistas al servicio de los planes de trabajo”, explicó el Rector Vivaldi.
El doctor Luis Berr recordó a los parlamentarios que «la tradición salubrista del país viene del Hospital Clínico de la Universidad de Chile», señalando que resulta crucial «encontrar una solución que permita que el hospital mantenga su labor”.
La presidenta de la Federación de Funcionarios de la Universidad de Chile (FENAFUCH), Myriam Barahona, enfatizó en el impacto de esta forma de relación con el estado en la estabilidad laboral de las y los trabajadores del Hospital Clínico.
A su vez, la diputada Natalia Castillo se mostró sorprendida por el nulo aporte financiero estatal al HCUCH y lo calificó como “una situación muy crítica, ya que el hospital sostuvo parte de la red durante la pandemia”.
La diputada Alejandra Sepúlveda agregó respecto a la posibilidad de acceso a créditos financieros que “se debería poder revisar al menos lo relativo al FOGAPE, porque se podría haber ampliado para algunas instituciones específicas”.
Finalmente, y en el marco de la tramitación del presupuesto público 2021, la presidenta de la Comisión, Gael Yeomans, llamó “a todos los parlamentarios a que podamos generar un canal de comunicación en especial con el Ministerio de Hacienda para revisar esta situación”.
Antonia Orellana / Fotos: Felipe PoGa
