a actividad contó con la participación de su madre, Laura Oñate, otros integrantes de su familia, y de autoridades de la Universidad de Chile, como la Rectora Rosa Devés y el decano Raúl Villarroel. También asistieron amistades, ex compañeros y compañeras de Pedagogía, Lengua y Literatura, y del preuniversitario popular que fundó, la editorial que publicó su libro póstumo, activistas por los derechos LGBTIQ+, y personalidades de la política, como la diputada Emilia Schneider, además de profesoras y profesores.
La ceremonia, organizada por la Dirección de Género y Diversidades Sexuales de la Facultad de Filosofía y Humanidades (DiGenDiFil), a cargo de la profesora Romina Pistacchio Hernández, dio cuenta de la importancia de la figura de Mara Rita, tanto dentro de la comunidad universitaria como fuera de ella, así como su legado pedagógico, poético y como activista que ha marcado a generaciones.
En su intervención, la Rectora Devés destacó la lucha de Mara Rita por la visibilización de las personas trans en el espacio universitario y la trascendencia de su decisión para la formación pedagógica. “La profesora trans Mara Rita, egresada de esta institución, tuvo que luchar en cada etapa de ese proceso, culminarlo desde su identidad en momentos en que no existían los instrumentos legales para el reconocimiento de los géneros, interna ni externamente”.
Además de su rol como poeta y escritora, destacó su compromiso con la construcción de una Universidad de Chile mucho más diversa. “Soñaba, a través de una pedagogía popular, acercar la Universidad a estudiantes trans desde un preuniversitario y -a la vez- abrir esta institución, su Casa Central, a una parte de la sociedad que se visibilizaba con muchas dificultades. Entonces, imaginó con otras y otros un espacio de estudio como refugio, un refugio como espacio de estudio, un lugar donde las personas trans pudieran decir su palabra sin miedo, con seguridad, con fuerza. El preuniversitario escuela popular Mara Rita hoy la nombra, como el decreto de cambio de nombre social, como también, hoy, este auditorio”.
“Honrando su memoria trabajaremos comprometidamente para que la Universidad de Chile sea el lugar donde no solo las verdades se tocan, sino también el territorio donde todas las identidades se encuentran, aprenden y se desarrollan”, agregó la máxima autoridad universitaria.
La profesora Olga Grau Duhart, académica del Departamento de Filosofía, del Centro de Estudios de Género y Cultura en América Latina y primera directora de Género y Diversidad Sexual de la Facultad de Filosofía y Humanidades, fue la ideóloga del nombramiento del auditorio, ya que, menciona, fue la misma comunidad la que otorgó el nombre en reconocimiento a su generosa manera de enseñar y participar en las políticas de género.
“Este fue un proceso que se dio con la participación activa de las organizaciones estudiantiles, el Centro de Estudiantes, la Coordinadora de Disidencia Sexual Mara Rita, la Asamblea de Mujeres Feministas, la Secretaría de Sexualidades y Género de la Facultad. Mara Rita enriqueció nuestra Facultad y nuestra Universidad con su empoderado, valiente y radical gesto contracultural a la hegemonía de los géneros encorsetados que nos han dañado tanto en sus fijezas”.
“Su nombre quedará atado a este auditorio, a un conjunto de acciones emprendidas por la comunidad universitaria y a otras que pudieran emprenderse que evocarán insistentemente la significación de su vida que nos abrió caminos de inteligibilidad y afecto expandidos”.
La directora de la DiGenDiFil, Romina Pistacchio, señaló que para su gestión es un privilegio instalar la placa que nombra el auditorio Mara Rita, un mandato ético. “Hoy le ofrecemos a Mara un salón que lleva su nombre, un espacio material que trasciende su paso por la Facultad y nuestras propias experiencias en ella. El nombre Mara Rita perdurará en este inmueble, en estas paredes, y con ello evitaremos su olvido”.
Luego de que se presentara la placa de homenaje, el decano Raúl Villarroel Soto relevó el legado de Mara Rita como activista y escritora. “Aprendimos que las diferencias no pueden transformarse en desigualdades y que la ilegitimidad de las minorías debe desaparecer. Probablemente, una de las riquezas de la juventud es su valentía para abrir nuevos caminos, enfrentándose a una institucionalidad que les va quedando estrecha y que, como en nuestro caso, siendo la primera universidad pública del país, necesita reflejar el tiempo que le toca vivir para cumplir efectivamente con su rol público”.
En este contexto, el decano anunció que la Facultad de Filosofía y Humanidades se sumó al proceso de certificación en estándares de igualdad de género y no discriminación del Sello Genera Igualdad que lleva en conjunto la Universidad de Chile y el PNUD. “Finalmente, hemos podido bautizar este auditorio con el nombre de Mara Rita junto a su madre, su familia, sus amistades y la comunidad universitaria con un inmenso agradecimiento por su existencia y su legado, por su fuerza y dignidad, por su poesía y los libros que nos legó. Estarás siempre presente entre nosotres, querida Mara Rita”, finalizó.
Poeta y profesora
En 2019, Ediciones del Intersticio publicó el libro póstumo Me arde. Constanza Alvarado, editora del poemario, destacó el compromiso de muchas y muchos cómplices, especialmente Vicente, su madre y sus hermanas, quienes acogieron el trabajo de rescatar la voz de Mara Rita desde el manuscrito. De igual forma, agradeció formar parte del ejercicio de memoria colectiva realizado por las personas convocadas en torno al nombre de Mara. “Es un espacio para que la profesora Mara nos siga enseñando”.
La misión educadora de Mara Rita fue reseñada por sus compañeras Catalina Díaz y Francine Silva del Preuniversitario Popular. El 2015, entre conversaciones de amigas feministas, abordaron la situación y acceso de la población trans a la educación superior: pensarla en el contexto de la barrera de la discriminación homolesbotransfóbica del sistema educativo que profundiza la brecha de desigualdad socioeconómica en Chile.
Con el apoyo de la entonces presidenta de la FECH y actual diputada Camila Rojas y la actual Rectora de la Universidad de Chile, profesora Rosa Devés, en aquel momento Vicerrectora de Asuntos Académicos, el proyecto comenzó en la Casa Central de la Universidad de Chile. Al poco andar tuvieron que enfrentar el fallecimiento de Mara Rita, quien fue velada en la FECH en compañía de la comunidad universitaria. Allí el preuniversitario toma su nombre por iniciativa de les estudiantes de la primera generación del preuniversitario.“Quisimos que el nombre de este proyecto surgiera del colectivo y que llevara el nombre de una activista movilizada por el deseo transformador y feminista, el deseo de educar: Escuela Popular Feminista Profesora Mara Rita”.
Catalina Díaz señaló que “nuestra escuela lleva su nombre por justicia, admiración y por un compromiso contra el olvido y el paso de la historia. Mara encarna los valores que nuestra escuela abraza hasta el día de hoy”. Para los desafíos que quedan, agrega, se requiere una profunda transformación a nivel de la institucionalidad. “Debemos transformar radicalmente la cultura universitaria entre docentes, estudiantes y funcionarios para que no exista más deserción por falta de humanidad y de esperanza. Debemos forzarnos a ver las partes conservadoras y excluyentes que aún nos forjan para dar paso a una universidad donde realmente sea del Chile libre, plurinacional, feminista, antiracista y democrático con el que soñamos hace tanto tiempo”.
Al finalizar, Catalina Díaz, hizo un llamado a las autoridades universitarias a trabajar en conjunto para que se otorgue el título póstumo para la familia de Mara Rita Villarroel Oñate. “Por dignidad, reconocimiento y justicia le debemos a nuestra querida Mara el derecho de celebrar que ha sido la primera profesora trans que ha egresado de la Universidad de Chile”.
Comunicaciones Facultad de Filosofía y Humanidades
Universidad de Chile
